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Política de protección de niños,
adolescentes y adultos vulnerables

Cáritas reconoce las necesidades particulares de los menores y los adultos vulnerables,
por tanto, se compromete a crear y mantener un entorno que proteja a estas personas.

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¿Qué es la Salvaguardia en Cáritas?

Es el compromiso individual y colectivo de proteger a las personas, especialmente a niños, niñas y adultos en situación de riesgo o vulnerabilidad, frente a cualquier daño o abuso que pueda surgir en su interacción con nuestro personal, aliados o representantes en el marco de nuestros programas y proyectos.

Esta responsabilidad implica garantizar la protección de la salud, el bienestar y los derechos humanos de todas las personas, promoviendo un entorno donde puedan vivir libres de daño, abuso y negligencia.

Este espacio busca reconocer y velar por el derecho a la protección de niños, niñas y adultos vulnerables, de cualquier daño que pueda ser causado por su contacto con Cáritas del Perú.


Esta página reúne las políticas y procedimientos que Cáritas del Perú ha implementado para proteger a las personas con las que trabaja de cualquier forma de abuso, explotación o daño.

No toleramos ningún tipo de abuso

Si tienes algún reclamo, queja o sospecha de abuso o violación de la política de salvaguardia ingresa a:

Cualquier conducta inadecuada que dañe la dignidad de las personas
Cualquier queja no sensible sobre nuestros servicios o ejecución de proyectos.

Las denuncias son confidenciales y son recibidas por nuestro equipo de expertos. Nuestros canales de denuncia son los siguientes:

  • Por correo electrónico: quejas.sensibles@caritas.org.pe
  • Por Whatsapp: +51 996 378 331

Cómo funciona el sistema de denuncias

Nos comprometemos a ponernos en contacto con todas las partes involucradas y actuar prontamente para gestionar y resolver todos los casos.  La duración del proceso variará dependiendo de la naturaleza y complejidad de la denuncia.

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Preguntas Frecuentes

Todo el personal de Cáritas del Perú y sus representantes tienen la obligación de reportar cualquier sospecha o preocupación sobre abuso, explotación o trata de personas que involucre a niños, niñas o adultos vulnerables. No presentar una denuncia puede poner en riesgo a las víctimas y a la propia organización, constituyendo una falta grave a las Normas de Salvaguardia y al Código de Conducta de Cáritas Internationalis.

Además, cualquier miembro de las comunidades con las que trabaja Cáritas del Perú, así como el público en general, socios y organismos oficiales, pueden presentar denuncias, reclamos o sugerencias a través de los canales establecidos en el “Procedimiento para la presentación de quejas y reclamaciones”. Estos mecanismos son seguros, accesibles y protegidos por el principio de confidencialidad, garantizando que toda preocupación sea atendida de manera adecuada y oportuna.

Cáritas del Perú trabaja activamente para prevenir el abuso y las conductas inadecuadas contra niños y adultos vulnerables a través de estrictas políticas de salvaguardia. La organización garantiza que todo su personal y representantes estén capacitados en estas normas, promoviendo un entorno seguro en sus programas y actividades. Además, implementa procedimientos rigurosos de selección de personal, asegurando que quienes forman parte de la institución cumplan con altos estándares éticos y de protección.

El personal y los representantes de Cáritas del Perú deben actuar en coherencia con los valores de la organización, brindando un trato respetuoso e inclusivo a todos los niños, niñas y adultos en situación de vulnerabilidad. Se prohíbe cualquier tipo de abuso, explotación o negligencia, estableciendo normas claras de conducta y contacto supervisado. Asimismo, se sanciona cualquier comportamiento inadecuado, garantizando procesos de denuncia y respuesta inmediata ante cualquier incidente.

La organización también refuerza su compromiso a través de la participación comunitaria y la gestión de riesgos, coordinando con entidades nacionales e internacionales para fortalecer sus mecanismos de protección. Cáritas del Perú mantiene una política de tolerancia cero frente a cualquier forma de abuso y explotación, integrando cláusulas de salvaguardia en sus acuerdos con socios y contratistas, asegurando que todos los actores involucrados en su labor cumplan con las más altas exigencias en materia de protección.